La expresión que da título a este escrito se le atribuye al historiador, filósofo y abogado francés, Francois Marie Arouet, más conocido como Voltaire. La premisa plantea el error lógico de comparar cosas reales con cosas irreales o alternativas idealizadas. Se refería Voltaire a la tendencia de suponer que existe una solución perfecta a un problema particular. La “Falacia del Nirvana”, como también se le llama, es la quimera de la perfección, que no pocas veces conduce a malograr lo que hasta el momento se ha hecho bien.
Muchas organizaciones se quedan envueltas en “La Falacia del Nirvana” y bajo ese manto se paralizan, se conforman y se quedan estancadas. Muchos también, se desempeñan bajo el esquema “Si funciona no lo toques” con lo cual, no buscan vías para ser más eficientes, eficaces y efectivos. Sin embargo, la historia nos ha enseñado que la INNOVACION es la base del progreso en términos de calidad, desempeño, conservación ambiental, eficiencia energética. INNOVAR es la clave para mantenerse vigente en el mercado, en hacer que tus productos sean exitosos y perduren a lo largo del tiempo.
Cuando los líderes de una organización abrazan como política la constante INNOVACIÓN, de sus productos y procesos, crean un hábito mental entre sus colaboradores que los induce a no conformarse con los resultados actuales, aún cuando estos sean muy buenos.
La INNOVACION además, permite mantener un clima organizacional fresco, donde la rutina se ve matizada por el nuevo quehacer constante. Estos climas organizacionales, contribuyen al trabajo en equipo, a mejorar la comunicación entre sus integrantes, a ser más proactivos y anticiparse a los cambios en el entorno.
INNOVAR no implica rehacer tus productos y procesos a diario. Eso, sería contraproducente ya que no permitiría asentar los logros alcanzados y crear una base firme para seguir al siguiente nivel de optimización e innovación.
INNOVAR implica asegurarnos que todos los integrantes de la organización entienden que cada proceso es perfectible, que cada producto es mejorable, que cada resultado puede y debe ser superado. Imagina usted amigo lector donde estuviéramos, si los creadores de los microcomputadores se hubiesen conformado con el primer PC o con el primer teléfono celular portátil? No existirían, por ejemplo, los smart phones y la interconectividad global que nos brinda Internet.
Crear una cultura organizacional que promueva, auspicie y reconozca la continua innovación (Continuous Process Improvement - CIP) es un activo altamente valorado por los clientes.
En general, cada vez más los consumidores son más exigentes y les gusta “casarse” con aquellas marcas que se muestran como innovadoras y de alta calidad. Un ejemplo, son los millones de personas alrededor del mundo que esperan a las puertas de las tiendas “Appel” cada vez que esa reconocida empresa anuncia el lanzamiento de un nuevo producto. Quien no reconoce este logo y lo asocia con innovación y calidad?
En Reinvéntate HOY Consultores & Asociados (www.goreinventate.com) te asesoremos desde cómo crear una cultura donde la Innovación sea un hábito, hasta como mantenerla en el tiempo.